Ya sea que esté comenzando a considerar la idea de asistir a terapia o que ya haya programado su primera sesión, es probable que se haya preguntado: “¿Cómo es la terapia?”. La mayoría de las personas se cuestionan qué esperar antes de iniciar este proceso, y para algunos puede ser una experiencia bastante inquietante.
Contar con una comprensión básica de lo que ocurre durante la primera sesión de terapia puede resultar muy útil para establecer una base sólida y calmar los nervios. Aunque cada práctica y terapeuta tiene sus particularidades, existen algunas similitudes para las que puede prepararse.
SU PRIMERA SESIÓN DE TERAPIA
Antes que nada, debe saber que su primera sesión de terapia será diferente a las demás, y no solo porque será una experiencia nueva para usted. Tanto usted como su terapeuta necesitarán una primera sesión de “evaluación inicial” para conocerse mutuamente ... además de ocuparse de algunos aspectos administrativos.
Registro y espera. Si asiste a terapia en persona, probablemente comenzará como la mayoría de las citas médicas. Llegará unos minutos antes, se registrará y esperará en una sala de espera general. Si se unirá a su cita en línea, recibirá un correo electrónico de bienvenida con un enlace para acceder a la sesión por video en el horario programado de su cita.
Complete algunos formularios. Antes de su primera sesión, deberá completar algunos formularios que pueden incluir información sobre su seguro, historial médico, inquietudes actuales, entre otros. Estos formularios se enviarán por correo electrónico a través de un portal seguro para clientes o estarán disponibles para completar justo antes de su primera sesión presencial.
Si tiene alguna pregunta, siempre puede consultar con el Coordinador de Atención que lo ayudó a programar su cita. Si no se siente cómodo respondiendo alguna de las preguntas personales, puede esperar y hablar sobre ellas directamente con su terapeuta.
Conozca a su terapeuta. El éxito de su experiencia en terapia dependerá en gran medida de la relación que establezca con su terapeuta. Si siente una buena conexión con él o ella, podrá comunicarse con facilidad, ser abierto y honesto, y confiar en sus orientaciones. Su terapeuta le hará preguntas para conocerlo mejor y simplemente entablar una conversación.
La primera sesión de terapia se centra menos en el tratamiento y más en conocerse: tanto con la práctica en general (a través de los formularios) como con el terapeuta en particular.
Algunas de las preguntas que el terapeuta podría hacer durante una primera sesión incluyen:
¿Por qué está buscando asesoramiento terapéutico?
¿Qué síntomas está experimentando?
¿Ha asistido a terapia en el pasado?
¿Qué ha hecho, o está haciendo, para cuidar su salud mental?
¿Qué espera obtener de la terapia o qué espera lograr durante el proceso terapéutico?
También es probable que le pregunten sobre su historial médico y de salud mental, así como sobre el historial de salud física y mental de su familia.
CONFIDENCIALIDAD EN LA TERAPIA Y EL ASESORAMIENTO
En la mayoría de los casos, un terapeuta no hablará ni podrá hablar sobre nada de lo que usted comparta con ellos o con la práctica. Su historial médico y de salud mental está completamente seguro.
Sin embargo, existen algunas situaciones específicas en las que cada terapeuta tiene un "deber de advertir" o se considera un "informante obligatorio." El deber de advertir está definido por la Asociación Americana de Psicología como la responsabilidad del terapeuta de romper la confidencialidad y presentar un informe a una autoridad legal si un cliente representa una amenaza para sí mismo, el terapeuta o una tercera parte. Los requisitos adicionales para el deber de advertir varían según el estado.
De manera similar, el término "informante obligatorio" describe el rol obligatorio de cualquier profesional que trabaje con personas vulnerables (generalmente niños). Estos profesionales, incluidos los consejeros y terapeutas, están obligados a romper la confidencialidad y presentar un informe cuando se sospecha o se observa abuso.
CONSEJO: PREPARE PREGUNTAS PARA EL TERAPEUTA
En algún momento durante su primera sesión de terapia, es probable que su nuevo consejero le pregunte si tiene alguna pregunta. ¡No sea tímido! Es importante que su terapeuta lo conozca durante esta primera sesión, pero también es igual de importante que usted aprenda sobre él o ella.
Algunas preguntas que podría querer hacer incluyen:
¿Qué tipo de formación, educación y/o experiencia tiene?
¿Se especializa en alguna terapia específica o en trabajar con ciertos problemas?
¿Tiene experiencia específica con mi(s) problema(s)?
¿Cuándo estaría obligado a romper la confidencialidad?
¿Cuántas sesiones cree que necesitaremos para resolver mi problema?
¿Qué debo esperar durante nuestras sesiones? / ¿Qué tipo de terapia cree que es la más adecuada para mí?
¿Qué debo planificar hacer entre las sesiones?
No hay respuestas correctas o incorrectas para la mayoría de estas preguntas, pero le brindará la oportunidad de escuchar al terapeuta y obtener una mejor idea de qué esperar en las sesiones normales. Es posible que su terapeuta incluso ofrezca mucha de esta información antes de que usted la pregunte.
A medida que encuentre o piense en preguntas que desea hacer, anótelas y llévelas a la primera sesión. Es fácil olvidar lo que quería preguntar cuando está sentado frente a alguien que está conociendo por primera vez.
MÉTODOS DE TERAPIA POPULARES
Es posible que su terapeuta hable sobre diferentes métodos o haga una recomendación sobre lo que cree que sería efectivo. No esperarán que usted conozca todos los detalles, y estarán encantados de responder todas sus preguntas, pero puede ayudarle a sentirse más cómodo si tiene una comprensión básica de los métodos de terapia populares antes de su primera sesión.
La terapia humanista o centrada en el cliente se basa en la idea de que cada persona ya posee dentro de sí misma lo que necesita. El trabajo del terapeuta es escuchar con empatía y guiar suavemente al cliente hacia sus propios descubrimientos.
La terapia cognitivo-conductual (TCC) se fundamenta en la idea de que tanto los pensamientos como las acciones modelan las emociones. Así, el trabajo del terapeuta es ayudar al cliente a reconocer patrones en sus pensamientos y/o comportamientos, y intervenir para ayudarlo a corregir su rumbo hacia un pensamiento o acción más útil.
La terapia psicodinámica es lo que muchas personas tienen en mente cuando piensan en terapia. Se enfoca en los motivos e influencias inconscientes, así como en el impacto de las experiencias tempranas de la infancia. Tradicionalmente, es un proceso terapéutico de larga duración.
La terapia conductual es un tipo de terapia activa basada en la idea de que nuestros comportamientos se desarrollan a partir de experiencias pasadas. Sin embargo, no se pasará mucho tiempo hablando sobre el pasado. Un terapeuta conductual utilizará la acción y la actividad para desensibilizarlo, por ejemplo, a un miedo irracional o para ayudarle a desarrollar una aversión hacia algo que desea evitar.
Existen otras formas de asesoramiento y terapia, y si su terapeuta recomienda algo diferente, no dude en preguntar qué es, cómo funciona, qué supone y por qué cree que es lo más adecuado para usted.
DURACIÓN DE LA TERAPIA
Al considerar qué esperar de la terapia, es posible que se pregunte cuánto tiempo llevará "resolver" su situación. Esta es una buena pregunta para hacerle a su terapeuta, pero tenga en cuenta que es una de las más difíciles de responder.
Dependiendo del problema o problemas con los que busque ayuda, el tipo de terapia, su conexión con el terapeuta, entre otros factores, resolver un problema a través de la terapia puede tomar desde unas pocas semanas hasta algunos años. Un consejero podrá ofrecerle una estimación aproximada al final de la primera sesión, pero será solo una estimación y cambiará a medida que empiece a trabajar junto al terapeuta.
Nota: Muchos planes de seguro solo cubren un número determinado de sesiones de terapia por año. Consulte con su compañía de seguros antes de su primera sesión de terapia y, si esto será un factor para su terapia continua, avísele inmediatamente al terapeuta.
CÓMO ELEGIR EL TERAPEUTA ADECUADO (PARA USTED)
Elegir al terapeuta adecuado para usted es una tarea muy importante. A veces, las personas asumen que si un terapeuta tiene la educación y experiencia suficientes, la conexión personal no importa. Sin embargo, estudio tras estudio sigue demostrando que esto es incorrecto.
La terapia es más efectiva cuando el cliente y el terapeuta se llevan bien. Aquí le ofrecemos algunos consejos para encontrar una buena opción:
Considere qué tipo de persona le resultaría más cómoda. Reconozca todos sus prejuicios sin culpa ni vergüenza. ¿Prefiere hablar con un hombre o una mujer? ¿Mayor o más joven? ¿Es importante que usted y el terapeuta compartan la misma etnia? ¿Religión? Sea honesto sobre con quién puede ser abierto y sincero, y con quién será capaz de escuchar.
Solicite y lea recomendaciones. Pregunte a sus redes locales o comience a buscar en Google, y lea reseñas. No hay garantía de que un terapeuta sea adecuado para usted solo porque haya sido útil para otra persona, pero es un buen comienzo.
Programe una llamada telefónica antes de agendar la primera sesión. Dígale al terapeuta por qué está considerando la terapia y pregunte sobre su experiencia, etc. A veces, puede aprender mucho sobre una persona solo a través de una llamada telefónica.
Considere las primeras dos o tres sesiones como un calentamiento. Puede saber después de la primera sesión de terapia si este terapeuta es el adecuado, pero no siempre. Si no está seguro, déle al terapeuta una o dos sesiones más para adentrarse realmente en la terapia y luego vea cómo se siente.
Si se reúne con un terapeuta y no cree que sea una buena opción, siempre puede solicitar trabajar con otra persona, ¡y no tiene que sentirse mal por ello! Si puede hablar con el terapeuta sobre por qué no siente que la relación es adecuada, es posible que puedan hacer algunos ajustes o conectarlo con alguien con quien pueda trabajar de manera más efectiva.
Si detesta la idea de tener esa conversación con su terapeuta, siempre puede pedirle a un miembro del personal administrativo de la práctica que lo transfiera a otro terapeuta. Ellos y/o el nuevo terapeuta pueden preguntar por qué solicitó el cambio, pero es solo para poder atenderlo mejor a usted y a otros clientes.
Le aseguro que la mayoría de los consejeros ya han tenido esta conversación con un cliente antes. Y la mayoría de los terapeutas realmente solo quieren ver a las personas prosperar, ¡incluso si eso significa trabajar con otro terapeuta! Ningún buen terapeuta le haría fracasar ni seguir sufriendo solo porque se sintiera mal por terminar la relación con él o ella.
DESPUÉS DE SU PRIMERA SESIÓN DE TERAPIA
Es posible que se sienta cansado o agotado después de su primera sesión de terapia. Esto es completamente normal. Es una experiencia intensa y completamente nueva, y realmente puede agotar su energía.
Con eso en mente, reflexione sobre cómo se sintió respecto a todos los aspectos de esa primera sesión. (Este es un buen ejercicio para escribir en un diario.)
¿Cómo se siente respecto al terapeuta con el que se reunió? ¿Sintió que hubo una buena conexión? ¿Tuvo alguna preocupación? ¿Qué le gustó más? ¿Menos?
¿Cómo se sintió respecto a la sesión en sí? Si se siente decepcionado, recuerde que la primera sesión es muy diferente a las siguientes. Si se siente incómodo o decepcionado, no se dé por vencido todavía.
¿Cómo se siente respecto al método de terapia que utilizará? ¿Está de acuerdo con su premisa? ¿Se siente esperanzado o sospechoso?
También es posible que tenga "tarea" del terapeuta después de la primera sesión. Si es así, asegúrese de hacerla bien.
¿CÓMO ES LA TERAPIA?
Es una pregunta difícil de responder, porque varía mucho. Sin embargo, en general, sepa que está bien sentirse un poco incómodo ante una experiencia nueva. Lleve una lista de preguntas que puede hacer para asegurarse de salir con la mejor comprensión posible sobre el terapeuta, el método, la práctica, etc.
Si ha estado considerando la terapia, no espere más. Encuentre algunos terapeutas en su área y comience a investigarlos. Hágalo su objetivo contactar al menos a tres dentro de la próxima semana para empezar a reducir la lista.
Y si está en Texas, los terapeutas de Neema considerarían un honor hablar con usted. Puede conocer a nuestro equipo de consejeros en línea, contactarnos o agendar una consulta gratuita.